Si Francisco Franco murió en 1975, y supuestamente después España vivió una regeneración política, ¿por qué en 2017 existen todavía dos presos del Franquismo?
Si luchar contra el expolio ya es complicado, luchar contra el expolio de la familia más poderosa del país es un plus; es como llegar al jefe final de un videojuego, y de hecho no es un símil tan descabellado, los Franco parecen ser los jefes finales de España. Sin embargo, hay jugadores que quieren llegar al colofón del juego y ganarlo. El programa de televisión El Intermedio es uno de esos jugadores.
En el programa de anoche, 13 de septiembre de 2017, emitieron un reportaje sobre el conflicto de las dos esculturas, y en él nos dimos cuenta cómo nadie informa del problema y cómo nadie sabe de la existencia de esas dos obras y por qué no están donde deberían de estar.
Abraham e Isaac son dos esculturas del Pórtico de la Gloria de la catedral de Santiago de Compostela, que por arte de magia, y tras una exposición en los años 60, pasaron a ser propiedad de los Franco. Así, sin más, sin papeleos ni nada. Desde entonces, todos los esfuerzos para devolverlas a su "hábitat natural" han sido en vano, ya que luchar contra esa estirpe es un trabajo más que arduo aun en nuestros días.
Hechos de este tipo están ocurriendo continuamente, algunos pueden solventarse, otros llevan años persiguiéndose (como el Pazo de Meirás, otro ejemplo muy visible sin salir de Galicia), e incluso muchos de ellos no tenemos idea ni de su existencia, pero iniciativas como ésta merecen la pena para que entre todos podamos ejercer presión sobre los poderes que tienen competencia para resolver estos asuntos y sobre todo para que la Ley de Patrimonio Histórico se cumpla, porque Abraham e Isaac forman parte de un conjunto escultórico declarado BIC, que a su vez forma parte del Patrimonio de la Humanidad (aunque supongo que aquí se jugará con la carta de que fueron declarados a posteriori de que el dictador los sustrayera...).
Si bien El Intermedio como programa "no puede enfrentarse" al problema por sí solo, sí puede darle visibilidad y difundirlo a través de uno de los medios que más llega a la sociedad actual: las redes sociales. Así que os invito a compartir el hashtag #FreeAbrahamIsaac para difundir este secuestro y que entre todos podamos aportar nuestro granito de arena para que los últimos presos del Franquismo puedan ser liberados y podamos disfrutar todos de un patrimonio que nos pertenece. El Maestro Mateo os lo agradecerá.
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