“Me encanta viajar, conocer países nuevos, otras culturas, deleitarme con paisajes espectaculares…”. ¿Si, seguro? ¿O lo que te encanta es hacerte fotos en esos maravillosos ambientes para fanfarronear de todos los sitios a los que has ido? Ah, y no te olvides de comprar la típica postal en la que aparece esa imagen espléndida del lugar. A la fotografía le debemos muchos de nuestros recuerdos visuales , y aunque en sus inicios no tuvo una buena acogida por parte del público, hoy sería impensable viajar sin meter en la maleta una cámara de fotos. Y es que a todos, o casi todos, nos gusta hacernos fotos y posar con uno de los famosos monumentos que ha dejado la humanidad: aguantando la Torre de Pisa , cogiendo con dos dedos la Torre Eiffel o caminando por el paso de peatones de Abbey Road . Sin embargo, con la fiebre del selfie parece que nos importa más quedar bien en la foto y que se vea claro dónde estamos, que no el hecho de hacernos la foto en el sitio y tenerla para el re...